Logopedia DISFONIA

LA DISFONÍA INFANTIL

Entendemos la disfonía, también conocida como afonía o ronquera, como la alteración de uno o más parámetros de la voz, que normalmente obligan al niño a esforzarse para hablar. 
Esta alteración de la voz puede afectar a cualquiera de sus cualidades, ya sea el timbre, que es la cualidad de la voz que permite diferenciar una voz de otras, el tono o frecuencia de la voz que puede ser más agudo o más grave, la intensidad y la duración de esta. 
Normalmente estas dificultades de voz aparecen en un momento puntual, ligadas por ejemplo a un virus localizado en la laringe, y se clasifican bajo el nombre de disfonías agudas. No obstante, si estas disfonías se repiten de forma crónica en el tiempo aparecen las llamadas disfonías crónicas. 
 

Estos problemas de voz afectan a entre un 30 y un 40% de la población escolar, y la tendencia actual sugiere que es más frecuente en niños que en niñas.
Normalmente los niños con problemas de voz suelen ser niños que gritan, con un tono de voz alto y su tipo de voz llama la atención a su entorno.  
 

Clasificación y causas de la disfonía infantil: A modo global, se pueden organizar las disfonías en dos grandes grupos, en función de las causas que la provocan. Estos grupos son:

- Disfonía orgánica: Las alteraciones de la voz correspondientes a este grupo están provocadas por causas orgánicas, como por ejemplo patologías congénitas como quistes, alteraciones de la laringe como laringitis crónicas, alteraciones post cirugía, etc.
- Disfonía funcional: Estas dificultades de voz aparecen por un comportamiento vocal inadecuado. Es importante corregir estas dificultades de voz ya que si existen hábitos vocales inadecuados pueden provocar alteraciones de la mucosa de las cuerdas vocales, como por ejemplo nódulos y pólipos. Este tipo de disfonías también pueden aparecer por hablar en ambientes ruidosos, con mucho humo, como alteraciones secundarias a alergias, etc. 

 

Tratamiento:
De forma muy frecuente, los padres de los niños con problemas de voz no dan la importancia necesaria a estas dificultades, y sin querer se habitúan a la voz del niño. Sim embargo, es importante acudir al pediatría y al logopeda para tratar estas dificultades.
En el tratamiento de la disfonía infantil se requiere un equipo multidisciplinar, con las figuras del pediatra y/u otorrinolaringólogo, el maestro, la familia del niño y el logopeda. 
Una vez el otorrinolaringólogo haya hecho un estudio completo del estado de la laringe, el logopeda debe valorar el estado de la voz del niño y dar las pautes de higiene vocal correctas así como ejercicios vocales en las sesiones para mejorar sus cualidades vocales. 

En las sesiones de logopedia con el objetivo de mejorar la calidad de la voz de los niños con disfonías u otras alteraciones de la voz, se trabaja con materiales y ejercicios muy diversos para fortalecer y potenciar la repsiración, la emisión vocal, la resonancia de la voz, etc, junto con otros aspectos que pueden interferir en la calidad de la emisión de los más pequeños de la casa.

Por último, un aspecto muy importante a trabajar tanto en las sesiones de logopedia como en casa, es la correcta higiene vocal del paciente. La higiene vocal corresponde a comportamientos y pautas para cuidar la voz del paciente, y así mejorar su voz. Algunas pautas que puede incluir una correcta higiene vocal son:

- Beber abundante agua. Mantener hidratada la laringe.

- Evitar hablar en ambientes de mucho ruido o humo.

- No hablar durante mucho tiempo con una intensidad elevada.

- Si existen dificultades vocales, conocidas como afonías, guardar reposo vocal y evitar realizar la voz susurrada. 

 

ÀGATA LORENZO CORDERO

      Logopeda, N.col 46883